¡¡ AMIGO FIEL !!

No hace muchos días se produjo una catástrofe tremenda en la zona sureste de Turquía que linda con Siria. Me vienen a l recuerdo muchas cosas, no en vano anduve deambulando por todas aquellas ciudades, ahora destruidas tanto en Turquía como en Siria, con el corazón henchido y orgulloso de servir a mí Patria y a la gente de bien del mundo, que también la hay. Tengo que decir que mi única recompensa fue, la satisfacción del deber cumplido, la sensación de haber servido a los demás (no solo a aquellos pobres muchachos MODERADOS, que no terroristas, así fueron reconocidos por la comunidad internacional hasta la escisión del grupo, sino a TODA LA GENTE DE BIEN DEL MUNDO) y el orgullo de que mientras yo me jugaba la vida, la gente podía pasear tranquila por las calles, tomar su aperitivo, ir a sus fincas, a la playa, centros comerciales…Uno no espera mucho a cambio, estaba orgulloso de lo que hacía, por mi educación siempre me gustò el servicio y siempre lo he hecho en todos los aspectos: laboral y personal al 200 %, y no me ha ido muy bien. Bueno, no es cuestión de contar mi vida, pero si ir dejando unos apuntes porque el tema al que voy a dedicar la entrada de hoy es a uno de los mayores regalos que nos dejó Nuestro Señor Jesucristo, LA AMISTAD,

y lo escribo con mayúsculas a propósito, pues Él mismo dijo, y así lo recoge Juan 15:13-17 : “Nadie puede tener amor más grande que dar la vida por sus amigos”, y Él la diò, fue humillado, golpeado, maltratado y ejecutado POR NOSOTROS luego hemos sido honrados por SU AMISTAD, ese es el verdadero concepto de amistad, que caló en mí desde bien pequeño. Nos consideró AMIGOS, no hay nada más grande. En cierto sentido, me sentí como él, no fui golpeado, ni maltratado físicamente, Él lo fue física y psicológicamente, en mi caso tan sólo la segunda. Cuando dejè de ser “útil” para mi servicio de inteligencia, me “dieron una patada en el culo” y en este “mundo global” aterricé en una sociedad, y no solo hablo de España, también de otros países en los que estuve tratando de buscarme la vida, que me rechazaba, que me ignoraban, mostraba su indiferencia…y no hay nada peor. Sientes una sensación de soledad tan abrumadora. La influencia de las “redes” y el amarillismo e invención de muchos periodistas: “asesino”,” terrorista”, “loco”, “mercenario”…entre muchas lindezas, pero miren, ¡Ni estoy, ni estuve en la cárcel!, luego no debì hacer nada malo. Era consciente que me arriesgaba también por gente a la que no conocía; la mayoría; e incluso por gente (no es un pensamiento muy cristiano y pido perdón) a la que odiaba o que me caía mal. Creo que en esos momentos a todos los que no fueran de Al Qaeda, ISIS (Estado islámico) o seguidores del dictador Basar Al Assad, los considerè amigos. En parte fui, y perdón por la comparación un poco como el Señor, “un romántico”, “un idealista”, así lo recoge el evangelio , (Mc. 3, 20-21), “ Vuelve a casa. Se aglomera otra vez la muchedumbre de modo que no podían comer. Se enteraron sus parientes y fueron a hacerse cargo de él, pues decían: « Está fuera de sí. »”. Ahora me alegro, ¿sabéis por qué?. Por que aunque sea solo en ese momento me parecì lejanamente al Señor.

Aquella época era ya casi un libro cerrado, pocos saben lo que es una guerra, lo que se ve en la tele, cuando tienes que empuñar un arma para salvar tu vida y la de los que están contigo. ¿Sabéis que recompensa recibì?. El tiempo y el maltrato de la vida te va “desempañando el cristal”, la sonrisa de aquellos muchachos, su respeto, su consideración, su agradecimiento. Nunca recibí un céntimo, más que los 1,500 euros mensuales que de los “fondos reservados” me entregaba el servicio de inteligencia en un sobre, porque ese dinero no pasa por contabilidad. Me bastó con ello. Perdí a muchos que dieron su vida, por mi y los demás, y de aquellos que quedaron probablemente haya perdido con esta tragedia muchos más y se em vuelven a abrir las carnes. Curioso el ser humano. Todos volcados con el terremoto y nadie ha “movido pieza” en una guerra que dura ya 13 años, no terminó todavía, pero eso sí, ¡olas de solidaridad!. Aquí en España en los noticieros salían durante unos días, porque los medios nos tratan como si fuéramos equinos, ponen la zanahoria delante y todos detrás, clamaban que los bancos de alimentos estaban vacíos, no había aportaciones, ¡y me alera muchísimo la solidaridad con esos pueblos tan necesitados!, pero ¿y la gente que pasa hambre aquí?, ¿y la gente que con estos fríos y nevadas tan espantosos que tenemos duerme en la calle y los pobres de la cruz roja les llevan café caliente?. ¿Es necesario un terremoto, un Tsunami, un volcán…en definitiva una tragedia natural, para que se nos mueva el corazón?. ¿Las obras del hombre: guerras, hambre…no nos conmueven?. Realmente, no lo entiendo. Recuerdo cuando estos chicos sirios me preguntaban, ¿ y usted que hace aquí, si nadie ha venido a ayudarnos?. Probablemente fui el primer extranjero en aterrizar por allí, primero para ayudar en la construcción de un campo de refugiados y después para meterme de lleno en aquel infierno. Lo de Turquía y Siria me recuerda a algún paso “legal” de la frontera turco-siria que realicé donde había miles de mujeres, niños, ancianos pegaditos a las vallas, no les dejaban entrar en Turquía que cambiaban chocolatinas por dinero para comprar leche en polvo para sus hermanitos bebes, ¿y quien estaba allí?. Lo recuerdo como si fuera ayer mismo, la media luna roja y ONG`s sirias, año 2013, ya dos años de guerra. Supongo que después quizá llegaran los demás.

Jesús no decía, clamaba…¡¡¡hacia!!!, no dijo: nadie demuestra mayor amor que el que da la vida por los amigos, sino que fue entregado, no escapó ni hizo uso de su poder divino, se dejó machacar y asesinar. Eso es COHERENCIA, además de AMOR.

Dice el Evangelio de San Juan 15-15 :” Ya no os llamo más siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor, sino que os he llamado amigos, porque todo lo que aprendí de mi Padre, os lo he dado a conocer”. Analicemos con detenimiento este versículo, es mucho más trascendente de lo que parece. ¿Nos podríamos llamar amigos de Jesús?. Estamos dando a conocer lo que Él nos enseñò a través de sus apóstoles.

Y ahora vuelvo, a un pasaje que he citado alguna vez, 1 Corintios 1:12: “Quiero decir, que cada uno de vosotros dice: Yo soy de Pablo; y yo de Apolos; y yo de Cefas; y yo de Cristo. 13 ¿Acaso está dividido Cristo? ¿Fue crucificado Pablo por vosotros? ¿O fuisteis bautizados en el nombre de Pablo?. Están muy bien todas esas organizaciones, hermandades, vocaciones, carismas…como lo queráis llamar, pero me remito a ese pasaje más en estos tiempos que vivimos de “problemas”. “vicisitudes” en nuestra iglesia, yo lo tengo claro: YO SOY SOLO DE CRISTO, ¿Dónde esta Cristo?. EN EL EVANGELIO y LOS OTROS ESCRITOS DEL MNUEVO TESTAMENTO. Y esta vida mía de vaivenes, me mostró el Señor que era mi entrenamiento, pleno de fracasos de los que aprender y de experiencias: lleguè a lo mas alto a nivel profesional y caì a lo mas bajo; lleguè a tenerlo todo materialmente y pase a “ser un mantenido de mi madre”; vivir una guerra en primera persona durante años (con consecuencias incluso físicas, pues fui herido y dada la situación el país, de la ciudad en este caso, Alepo te quitaban el trozo de metralla, suero, venda y a la lucha, y a raíz de un grave accidente que tuve aquí trabajando de auxiliar de obra en la vía del tren descubrieron que aquella herida tuvo como consecuencia una lesión cerebral, de la que gracias a Dios me recuperè); dar el 200% en todo y recibir el salario mínimo en España que son 700 euros, sin cobrar incentivos o extras por trabajos nocturnos, u horas extras…volver a tener la vida personal medio encaminada y de repente todo se cae…

¡Me alejé de Él!, había que buscar un culpable, dejè a mi AMIGO, pero el no me falló, porque es un amigo real, el mejor. Desee odiarle, no pude porque me daba miedo condenarme, pero “me caía mal”. Dejè la iglesia, los sacramentos….¡que más daba!, ¿de que me servía?, ¿Qué me producía? (rentabilidad), intentè ser malo, veìa que a los malos les iba bien, mira mi queridísima amiga Inés a Petro, que es un ser poseído por el maligno y lo tenéis allí en Colombia, nada menos que de presidente, y aquí notros tenemos a Sánchez, que no le queda muy lejos. ¡¡ No pude ser malo!!, no va conmigo. Él Señor, que solo Él sabe como hace las cosas, me fue llevando a su terreno, a meditar, a tener consciencia, que no conciencia que ya la tenia, a madurar mis experiencias, a valorarlas, y además me puso a estudiar, ¿para que?. Para ser un amigo como Él.

Me hablò, y es real, no de locos, desde la custodia en la capilla de Adoración perpetua: Seguidme, y os haré pescadores de hombres.( Mc 1-16,21); Echad de entre vosotros al mal (1ª Corintios 5-17); No tengáis miedo, confío en Dios (Hechos 27, 21 26). Y como el “maligno” es muy astuto, te hace dudar y ayer me dirigì al Señor, en silencio y le dije: “ Señor, ¿Qué c…(palabrota) quieres que haga?. Su respuesta: “Cobrad fuerzas en el poder soberano del Señor. Revestíos de la armadura de Dios…nuestra lucha no es contra esta gente de carne y hueso, es contra principados y potestades, contra los dominadores de este mundo tenebroso, contra los espíritus del mal…..” (1 Efesios 6, 10-20)

Vamos que me lo dejó bien claro, por eso me puso a estudiar apologética, angelología y demonología, sanación. Pero, aquí sigo esperando la llamada, porque aunque me tuve que pagar los cursos, me dijo que me dejara llevar por la Divina Providencia. ¿Por qué América?. Por que, a pesar de lo que estáis pasando, que no es poco, allí está el futuro de nuestra iglesia. Debéis formaros, no basta orar y cumplir, hay que conocer bien al enemigo, sanar corazones y ganar almas arrebatadas por el antiteismo. Me encomendó que fuera mi boca y mi corazón una extensión Suya para formar sólidos cimientos, sobre roca, para cuando lleguè el ataque definitivo (Solo Dios lo sabe), pero quizá no tarde, “tengamos todo lo que recoge en Efesios listo y formemos parte de las “tropas de Su general, San Miguel Arcángel. ¡Hay tantas almas que formar, tantas que rescatar, tantas que dejar listas para la defensa y fidelidad ante lo que vendrá!, quizá no a nosotros, pero si a hijos o nietos. Eso solo Dios lo sabe. Pero, que por nosotros no quede.

Yo tengo lo que necesito para comenzar (me vendría bien un trabajo para mantenerme, y un sacerdote valiente con fe verdadera que crea que como Cristo sanó, nosotros podemos ser instrumentos de sanación, que crea en el maligno, que no en el mal, como ente insidioso cuya única misión y deseo es arrebatar almas a Dios nuestro Señor), pero dinero para el billete lo tengo.

QUIERO SER Y DEMOSTRARLE A JESUS QUE SOY SU AMIGO DE VERDAD. Ser amigo de publicanos y de pecadores; hacer lo que Él me manda (Vosotros sois mis amigos, si hacéis esto que os mando.), y si procede ser entregado aún por padres y hermanos, y parientes y amigos; y morir y ser odiado a causa de Su nombre.

Pero creo en Él, confío en Él y como dijo “ ni un cabello de vuestra cabeza se perderá. En vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas “